
Para mejorar nuestra capacidad de tomar decisiones o, aunque sólo sea, para reflexionar sobre ello, cabe plantearse dos temas previos estrechamente relacionados: Uno, menos importante, de carácter práctico: ¿Qué es, en sentido estricto, una decisión? Y 2) el verdadero problema: ¿Cómo entendemos lo humano? ¿Cómo se entiende usted a sí mismo como humano? Y, sobre todo, ¿qué relación puede haber entre su visión de sí mismo como humano y su capacidad de tomar decisiones? Leer...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario